La actividad de los taladros de perforación de pozos petroleros en el Ecuador ha caído significativamente desde el 2014 como consecuencia de la crisis por la baja del precio del crudo.

Dos fuentes de información hidrocarburífera reflejan una caída en la operación de estos equipos en los primeros meses de este año respecto al mismo período del 2015.

El ingeniero petrolero Jorge Rosas elabora, desde 1991, un reporte mensual sobre la operación de los taladros de perforación en el país, basado en información de firmas operadoras y de servicios. El reporte se entrega mensualmente a 300 directivos y funcionarios de la industria petrolera local.

Las cifras revelan que, en Ecuador, hubo un pico de operación de taladros de perforación entre abril y junio del 2013 cuando 43 estaban activos.

Desde entonces, el número de taladros registra una tendencia a la baja. Mientras en los primeros días de marzo del 2015 operaban en el país 30 de estos equipos, el 1 de marzo de este año estaban activos apenas ocho taladros de perforación. En tanto, el número de taladros inactivos pasó de 16 a 35 en ese lapso, dice el reporte.

El objetivo de un taladro de perforación es construir el pozo, por donde se extraerá el petróleo. Mientras más taladros operan, más pozos se perforan y más petróleo es extraído y a la inversa.

Para Rosas, la baja en la contratación de esos taladros está influenciada por la caída de precios del crudo, que ha impactado en los costos de la industria. Como consecuencia, existen menos inversiones y se perforan menos pozos.

El precio del barril de crudo local cayó 75% desde junio del 2014 hasta los primeros meses del 2016. El Fisco ha visto mermados sus ingresos y ha tenido que recortar inversiones, incluso en el sector petrolero.

El año pasado, Petroamazonas redujo su presupuesto de USD 4 670 millones a 3 533 millones y tuvo que priorizar sus gastos para campos con menores costos de producción. En diciembre pasado, la empresa firmó un contrato con Schlumberger para que asuma las inversiones en el campo Auca y, así, liberar esos recursos. Y se negocia un contrato similar para el campo Sacha.

Rosas cree que otro factor que está incidiendo en la actividad de los taladros es que muchos campos en el país han sido intensamente perforados por su antigüedad y no requieren de más perforaciones.

El costo diario de un taladro puede llegar a unos USD 100 000, según Rosas, y emplea a unas 100 personas.

El exvicepresidente de Petroindustrial, Edmundo Brown, indica que como consecuencia de una menor operación de taladros de perforación, no aumenta la producción de crudo ni se suman nuevas reservas petroleras.

De hecho, la producción nacional de crudo bajó un 2% entre el 2014 y el 2015. Y para este año se prevé una caída similar según datos contemplados en la Pro forma presupuestaria.

La empresa de servicios Baker Hughes también registra una menor actividad de los taladros en el país. Según un reporte publicado en su página web, el número de taladros activos en el país bajó de 15 en enero del 2015 a uno en el mismo mes del presente año.

La diferencia respecto los datos de Rosas se debe a que Baker Hughes solo considera activo a un taladro cuando la broca está perforando. No contabilizan a los taladros cuando realizan otros procesos. Además de perforar el pozo, un taladro se usa para instalar otros equipos en su interior como tubería de revestimiento de producción.

Un taladro, en el ITT

La empresa pública Petroamazonas reportó en su web que desde los primeros días de marzo ya está movilizando un taladro para el campo Tiputini en el ITT. Pese a que el Gobierno proyecta un precio de barril de petróleo de USD 25; esto es USD 10 menos que lo inicialmente esperado para este año, el número de taladros podría subir. Esto, debido a la intervención de Schlumberger en Auca, lo cual demandaría de unos tres equipos adicionales. De llegarse a una intervención similar en Sacha se esperaría otros tres más, dice Rosas.

También Belorusneft anunció que hará perforaciones en el campo Armadillo de Petroamazonas para optimizar su producción.

Este Diario pidió, vía correo, la versión sobre el tema al Ministerio de Hidrocarburos el 22 de febrero pasado, pero no hubo una respuesta.

Fuente: El Comercio